Qué visitar en Nápoles
Spaccanapoli
Comúnmente llamado Decumano Inferiore, Spaccanapoli, es un camino lineal, de más de un kilómetro de largo, que divide la antigua ciudad entre el norte y el sur.
El paseo comienza en los Quartieri Spagnoli y termina en Forcella. Un tesoro de historia e historias entre edificios antiguos e iglesias como la Iglesia del Gesù Nuovo, la Basílica de Santa Chiara y la Iglesia de San Domenico Maggiore. Un lugar lleno de vitalidad y pasiones: desde los artistas callejeros hasta los históricos talleres de artesanos, desde las leyendas y mitos de la ciudad hasta los inconfundibles olores de la cocina napolitana.
Capilla de SanseveroDistancia: 1,1 Km • Cómo llegar
Hay un Nápoles esotérico, alquímico y masónico que se esconde bajo el color y el folclore de la postal. Para aquellos que deseen probarlo, la Capilla Sansevero, cerca de la Piazza San Domenico Maggiore, es el lugar ideal.
Cargado de simbolismo y de obras preciosas, refleja el carisma y la oscura inspiración del Príncipe Raimondo di Sangro, que lo amplió y enriqueció en el siglo XVIII. En el interior, cabe destacar: el Cristo Velado, una obra maestra de mármol de Giuseppe Sanmartino, y las Máquinas Anatómicas, alrededor de las cuales se cierne el misterio de su creación.
Piazza del PlebiscitoDistancia: 850 metros • Cómo llegar
Está vigilada por la realeza de todas las épocas y escudos de armas: normandos, suevos, angevinos, Habsburgo, Borbones, Saboya, esculpidos en las estatuas del Palacio Real. Es la arena de los grandes conciertos, pero también de los «scugnizzi» que, a la sombra de los caballos de bronce, hacen gala de sus habilidades futbolísticas, soñando con balones de oro.
La Piazza del Plebiscito, junto con el Palacio Real, es el escenario del paseo multiétnico que conduce desde la Vía Toledo hacia el mar, y es uno de los símbolos de Nápoles. 25 mil metros cuadrados de belleza, rodeados por una columnata y la basílica de San Francisco de Paola, no lejos de otras joyas: la Galería Umberto I, el teatro San Carlo y el Maschio Angioino.
Teatro San Carlo
Distancia: 700 metros • Cómo llegar
Galleria Umberto I
Distancia: 650 metros • Cómo llegar
Maschio Angioino
Distancia: 450 metros • Cómo llegar
Nápoles subterráneaDistancia: 1,4 Km • Cómo llegar
En la Plaza San Gaetano se puede ver la Nápoles subterránea. Desde aquí, en el corazón del centro histórico, cerca de la Via dei Tribunali, comienza el descenso a la «ciudad de abajo».
Ciento cincuenta pasos y cuarenta metros de bajada, en un viaje en el tiempo desde la Segunda Guerra Mundial hasta el Imperio Romano.
Túneles, pasillos estrechos, cisternas que hasta principios del siglo XX fueron excavadas para el suministro de agua, viento por metros en las cavidades de toba. Será la guerra la que transformará su uso: la Nápoles oculta ofrecerá a la población refugios contra las bombas.
DuomoDistancia: 1,6 Km • Cómo llegar
Una fachada neogótica de mármol, de 50 metros de ancho. Un interior grandioso, a medio camino entre el Renacimiento y el Barroco, embellecido con pinturas de Luca Giordano, de planta de cruz latina, tres naves con dos filas de ocho pilares cada una, capillas laterales.
La Catedral de Nápoles, a un tiro de piedra de los decumanos, es un tesoro de arte e historia. A pesar de los cambios arquitectónicos (la iglesia no se terminó hasta el siglo XIX), el estilo gótico original se ha conservado en el exterior. Es aquí donde, tres veces al año, se produce el derretimiento de la sangre de San Gennaro.
CapodimonteDistancia: 1,4 Km • Cómo llegar
Plantado en la colina del mismo nombre, en un «oasis» de ciento veinte hectáreas, el espléndido Palacio de Capodimonte tiene vistas a Nápoles. Originalmente la residencia de vacaciones de los Borbones, pero desde el principio «segura» de los tesoros de la familia real, ahora alberga un extraordinario patrimonio que incluye pinturas de Rafael, Tiziano, Bellini, Mantegna, junto con la Galería Farnese, la colección D’Avalos, la galería de porcelana, la sala de tapices, además de toda un ala dedicada al siglo XIX y al arte contemporáneo.
San MartinoDistancia: 2 Km • Cómo llegar
De una residencia cartujana a un museo. Este fue el deseo de Giuseppe Fiorelli, arqueólogo. En las salas del Museo Nacional de San Martino se puede recorrer la historia del Reino de Nápoles y de las Dos Sicilias, con la mirada perdida en el guache natural pintado por el golfo, el mar, la Cartuja que se extiende hacia la imponente tripa de los callejones de abajo.
Desde la década de 1990 el Museo ha incorporado nuevas colecciones, incluyendo una sección naval y una de artes decorativas.
Escaleras de Nápoles
Nápoles es explorada de arriba a abajo. Subidas, bajadas, rampas, escaleras, escalones conectan el vientre de los callejones con la ciudad alta, la que nació de la expansión urbana desde 1300. Cantucci o caminos panorámicos, pequeños balcones y flores acompañan los pasos de aquellos que quieren desafiar el esfuerzo y subir a los lados de la ciudad. Se pierde la cuenta del número de escaleras en Nápoles. La Pedamentina es una de las más famosas, conecta la Certosa di San Martino con el casco antiguo y cuenta con 650 metros y 414 escalones. Hay muchos otros competidores como el Petraio, las rampas de Sant’Antonio, la calata San Francesco, las rampas Brancaccio, los escalones de Chiaia.
San Gregorio ArmenoDistancia: 1,3 Km • Cómo llegar
Es el camino de los pastores. Caminas siguiendo el flujo de gente que lo anima durante todo el año. No importa si las fiestas están lejos, en San Gregorio Armeno siempre es Navidad. Y las figuritas, así como los turistas, nunca faltan. Situados en la estrecha calle que une el decumano principal (via dei Tribunali) con el inferior (via San Biagio dei Librai) e intercalados con iglesias, los talleres de artesanos le encantarán con sus exposiciones de figuritas, desde las «canónicas» hasta las formadas por los chismes y la actualidad. Celebridades, políticos, coristas y actores: junto al bebé y a San José también están ellos.
Port'AlbaDistancia: 1,1 Km • Cómo llegar
El núcleo de papel de la ciudad. Se puede oler el olor de la tinta mezclada con el de la pizza frita o la cartera aún caliente en cuanto se gira la esquina de la plaza con la vate suprema y se sumerge en el sombreado pasillo que lleva a la Piazza Bellini, lugar de encuentro de bohemios y literatos.
Port’Alba es una de las antiguas puertas de la ciudad y sólo puede ser visitada a pie. Entre los puestos de libros amarillentos por el tiempo, los de impresión más reciente y los edificios que datan del 700. La magia está toda allí.
Lungomare CaraccioloDistancia: 3 Km • Cómo llegar
Es el paseo marítimo dedicado al almirante napolitano del siglo XVIII Francesco Caracciolo. Nacida de la agitación urbana iniciada en 1800, antes de eso, la playa se encontraba en la villa municipal.
Hoy, liberada de los coches, es la postal romántica de la ciudad. Un sendero de unos 3 km que corre a lo largo del mar donde es posible admirar el Vesubio, la isla de Capri, el Borgo Marinari, Castel dell’Ovo y la colina de Posillipo. En el lado opuesto al mar el parque verde de la Villa Comunale con el fondo de la colina del Vomero y Castel Sant’Elmo.
Uno de los lugares más queridos y frecuentados por ciudadanos y turistas, constantemente animado por eventos y espectáculos pero también por los numerosos bares, restaurantes y pizzerías que se alternan a lo largo del camino.